
Jaya y Vijaya, los dos guardianes de las puertas de Vaikuntha habian venido al mundo material maldecidos por los cuatro Kumaras.







Intoxicado físicamente por el vino y mentalmente por el poder, Hiranyakasipu gobernó el universo muy duramente.
Durante esta época, su reina, Kayadhu, le dio un hijo llamado Prahlada. Él era el reservorio de todas las cualidades trascendentales pues era un devoto puro del Señor Vishnu.

Determinado a entender a la Verdad Absoluta, él tenía completo control de todos sus sentidos y mente, él era muy bondadoso con todas las entidades vivientes y el mejor amigo de todos.

Con las personas respetables se comportaba justamente como un siervo pacífico, para los pobres él era como un padre, y para el resto era siempre como un simpático hermano. Siempre muy humilde, él consideraba a sus profesores y maestros espirituales tan buenos como el proprio Señor. Él estaba completamente libre de orgullo, aun habiendo nacido en medio de la riqueza, la belleza y la aristocracia.

Hiranyakasipu quería educar a su hijo como un poderoso demonio, más Prahlada solamente quería aprender sobre el servicio devocional al Señor Vishnu. Después de que el pequeño Prahlada hubiera frecuentado la escuela por algún tiempo, Hiranyakasipu lo puso en su regazo y afectuosamente le pidió –mi querido hijo, por favor dime, cuál es tu tema favorito en la escuela?
Sin miedo, Prahlada dijo: "Oír (sravanam) y cantar (kirtanam) los santos nombres, formas, cualidades, parafernalia, y pasatiempos del Señor Supremo; acordándose (smaranam) de ellos; sirviendo los pies de loto del Señor (pada-sevanam); ofreciendo al Señor respetuosas reverencias y adoración en sus dieciséis tipos de parafernalia (arcanam); ofreciendo oraciones al Señor (vandanam); tornándose Su siervo (dasyam); considerando al Señor como el mejor amigo (sakhyam); y rindiéndose a Él (atma-nivedanam, en otras palabras, sirviéndolo con su cuerpo, mente y palabras).

Estos nueve procesos son conocidos como servicio devocional puro, y yo considero a cualquiera que se haya dedicado al servicio del Señor Vishnu, a través de estos nueve métodos, como la persona más erudita por haber adquirido conocimiento completo."
Ciego de odio, Hiranyakasipu lanzó a Prahlada de su regazo al piso.

"Siervos! Llévenselo de aquí y mátenlo de una vez!" –gritó él. Sin embargo, Prahlada se sentó en silencio y meditó en la Personalidad de Dios, y las armas de los demonios no tenían efecto en él. Viendo esto Hiranyakasipu tuvo miedo y planeo diversos métodos para matar a su hijo. Sus siervos lanzaron a Prahlada bajo las patas de un elefante



; lo tiraron en medio de venenosas cobras


; le lanzaron muchos hechizos; también lo arrojaron de la cima de una montaña

; le dieron veneno; lo dejaron pasar hambre; lo expusieron al frío intenso, y al fuego y al agua; y le arrojaron grandes piedras para aplastarlo.

Entonces, Hiranyakasipu envió a su hermana, Holika, a quemarlo, más fue ella la que resultó quemada.

En una de las tentativas de Hiranyakashipu de matar Prahlada debía hacerlo sentar sobre una hoguera ardiente con su hermana Holika. Holika tenía un regalo especial que le impedia ser dañada por el fuego. Prahlada cantó el nombre de Vishnu y en la batalla de bien contra el mal, Holika fue quemada pero nada pasó a Prahlad. La combustión de Holika es celebrada como Holi el festival en el hinduismo .
A pesar de todo Prahlada estaba siempre absorto en pensar en Vishnu,







